Hoy se propuso hablar sobre la autoayuda. Las cosas que nos ayudan son muchas, al amparo de las posibles que la sociedad nos ofrece... Se entabló un poco el debate entre algo así como consumir actividades y respecto a la calidad de las mismas.(esto es algo así como el discurso del costo-beneficio y satisfacción y participación
No es tanto lo primero como lo segundo lo importante y se enumeraron propuestas muchas de ellas practicables como ejemplo de la experiencia de los asistentes así como lecciones que hemos ido aprendiendo.
Andar cuatro horas, desdramatizar y tener sentido del humor (alguno dijo dramatizar como mejor opción( , confiar en nosotros mismos, ser optimista...
El optimismo es una predisposición a ver y juzgar las cosas de la manera más favorable... Se añadió no solo ser optimista, sino conseguir más cosas, tener un ritmo normal que permita vivir, dirigirse a nuestras metas, tener objetivos, como por ejemplo salir, y acostumbrarse, o adquirir hábitos saludables; (de las costumbres se hacen leyes, o silencio en la sala que mi abuela está mala (esta última de en otro taller) son sin duda cosas útiles y que nos benefician).
Ya la guinda del pastel como dijo otro compañero, es compartir... aunque yo creo que sin compartir con los que se quiere no hay autoayuda que sirva. Buscar la soledad, que es inmaduro a veces es necesario... para el que firma la soledad debe ser agradable... aunque de todas, todas, cabe argüir los peculiares lazos (diversidad de vínculos posible) y las adecuadas maneras de conducirse de las personas.
Es todo por hoy. La compañera que preparó la sesión nos hizo comprender muy bien que esto de lo que convenimos hoy que es la autoayuda, es importante.
con cariño, cordialmente, Antonio luque fernández.
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