Para una buena respiración debemos pensar en lo que hacemos y sentimos en ese momento, como actuamos y la influencia de nuestros movimientos corporales: tensión, sudoración y temblores… es necesario que nuestra mente y cuerpo estén sosegados y relajados.
La técnica sosegada se define como succión: cuando fumamos succionamos profundamente, es decir, inhalas profundamente y sientes placer; cuando somos bebés nos dan un chupete o un biberón, y al succionarlos, el bebé se siente complacido y se calma, con un poco más de edad succionas caramelos, chupachups… que provocan relax, como beben agua respiran profundamente.
La succión nos condiciona desde que somos bebés. No os ha pasado que cuando conocéis a alguien os sentís un poco nerviosos y apurados, pues si es así, utilizar el movimiento de elevar la mirada hacia el techo, eso denota que estáis ansiosos o tensos, si por el contrario, estáis decaídos, debéis mirar a los ojos de la persona que acabáis de conocer, esto contrarrestará el efecto y lograréis no sentiros incómodos.
Otra técnica muy reconfortante, y una de las más eficaces bajo mi punto de vista, es el abrazarse, el tacto, el latido del corazón y la sensación de unir piel con piel, es la mejor medicación para cuerpo y mente.
Bibi nos contó un experimento que se realizó con monos bebés: les ofrecieron comida y a la vez contacto con otros bebés, y la mayoría prefirió relacionarse y contactar con sus manos y cuerpo con sus semejantes, antes que la comida. ¿A que es precioso y maravilloso el resultado de este experimento?
Es fenomenal y suscita un gran alivio saber que por encima de todo hay mucha humanidad y fraternidad en este mundo mundial donde siempre parece que solo las malas noticias son las que predominan. Todos necesitamos de todos y somos iguales, pero unidos es lo más de lo más.
Otra técnica de relajación es el ejercicio y estiramiento, “familia” hay que dedicar un trocito de día al deporte (es salud mental). Así que a levantar los traseros del sofá, y ahora que llega el veranito a nadar y dar largos paseos por la orilla del mar. ¡Actividad familia!, ¡os quiero en marcha ya!
La inhalación y exhalación, el olisquear cualquier aroma, sea de comida, perfume, naturaleza, mar… es muy relajante, probar y exhalar todos los aromas que tengáis a vuestro alcance, os beneficiará, poner todos vuestros sentidos en disposición de aprovecharlo todo.
Otra técnica muy eficiente cuando notéis un estado de crisis ansiosa, tensada y alterada, es colocar tus manos en forma de vasija y acercártelo a la boca procurando no dejar que se escabulla el aire que respiras y el que exhalas compensando así el nivel de dióxido de carbono, tómalo y expúlsalo, y puedes utilizar una bolsa de papel y hacer estos ejercicios de tomar dióxido de carbono y expulsarlo, os dejará menos ansiosos, todo funciona.
Cuando realizas estiramientos y bostezos, estás también relajándote.
El yoga, yoguis hindú es otra técnica de relajación, hay otras más complejas como el automasaje, que es un dígito de la medicina china.
El próximo del que os voy a hablar se realiza con nuestras propias manos, procuraré explicarlo de una manera que os pueda llegar, y que podáis entender, haber si lo consigo, “atentos”: colocar los 2 dedos pulgares y los índices en las cejas presionando y dándoos pellizquitos fuertes de un extremo al otro y repetirlo varias veces, haced lo mismo con las orejas empezando por el lóbulo de la oreja hasta terminar en el extremo opuesto de ésta. Ahora apretaros con el dedo anular de la derecha, el lado izquierdo de la nariz sin dejar hueco para inhalar, inhala con el lado derecho, cuando lo hayas hecho aprieta el lado derecho con el dedo pulgar y aguanta todo lo que puedas sin abrir la boca, después retira el dedo pulgar y exhala, y así varias repeticiones. Luego elabora esta misma acción con los dedos izquierdos, es decir el lado opuesto.
La siguiente técnica consiste en poner los dedos en la nariz pasando por las mejillas, apretando y estirando la piel y llegando hasta las orejas, hay que realizarlo en los 2 lados de la nariz. A continuación, estira el mentón a la vez que el labio superior y haz varias repeticiones, y por último, masajéate los brazos desde los hombros hasta las muñecas presionando muy fuerte, sin llegar a sentir dolor (por supuesto) y recorre con tus dedos la frente del lado izquierdo al derecho estirando tu piel a la vez que te la masajeas, y no te importe apretar, será más efectivo.
Con todas estas técnicas de relajación, me estoy quedando dormida, cosa que a mi me suele costar un poco, así que si lo hago yo, ustedes, mi familia, lo haréis también, cuanto más os pongáis en la faena y lo practiquéis, más lo necesitaréis, formará parte de vuestra rutina, agregarlo a vuestro día a día. Funciona de tal manera que dejaré de escribir un rato, y cuando despierte de este aletargamiento, volveré, porque no he acabado aún.
Ya estoy aquí de nuevo, después de un par de horas de siesta y con la mente más despierta, y con ganas de transmitiros las técnicas que Bibi me enseña y que yo quiero que vosotros las viváis también, puesto que me ayuda mucho a sentirme bien conmigo mismo.
Otra novedosa técnica de relajación es la llamada técnica occidental progresiva de Jacobson, consiste en buscar la tensión en los músculos, manteniéndola y combinándola con la relajación:
Nos sentaremos con el tronco y la espalda derechos, las piernas paralelas, apoyando los pies en el suelo y los brazos colocados de forma que las palmas de las manos toquen vuestros muslos.
Tensaremos los ojos y abriremos la boca cuanto podamos.
Encogeremos el estómago tensándolo.
Apretaremos los puños.
Echaremos los codos hacia la espalda todo lo posible sin dejar de apretar los puños de las manos.
Y por último colocaremos las piernas hacia delante en paralelo, combinando la tensión y la relajación.
Tensar todo lo que os podáis permitir y luego relajaros, y así sucesivamente varias veces, descargar y cargaros de tensión y aguantar cuanto más rato mejor, si tenéis alguna duda meteros en el blog de SAPAME, y preguntar y pasaros por aquí, os gustará el ambiente tan cordial que respiramos.
Vamos a hablar de la respiración abdominal. Cuando estáis tumbaditos en la cama, inhalar profundamente hasta que vuestro abdomen parezca un globo lleno de aire, ponte unos libros en el estómago y después de unos segundos al exhalar notaréis los libros que están aposentados encima de tu estómago bajaron, y luego llénate de aire y vuelve a subir y así varias repeticiones, lograréis realizar esta técnica correctamente.
La visualización es otra técnica de relajación, este sentido unido al gusto, oído y todos en funcionamiento a la vez es muy eficiente. El ver el mar, olerlo y degustar en tu boca ese sabor a sal de mar, será una gozada para vuestros sentidos y para vuestra mente.
Oír una melodía, ver una fotografía o paisaje bonito, leer o simplemente ver una buena película, tomar algo salado o dulce es una fuente de buenas sensaciones y emociones que nos serán de gran alivio.
Hoy me he pasado, así que lo de hoy se lo dedico a mis niños Óscar, Ada y Cristina, que los pobres van a trabajar un poco con el ordenador, por mi causa, no sé a cual le tocará elaborarlo, así que muñecos, un besazo de Rosa, (es necesario que todos los que no asistís al taller de Bibiana podáis entender lo que ella os quiere decir, a través de mi). Gracias de nuevo Bibi.
Un abrazo y 1.000 besos.
ROSA.
P.D.: Y si te toca a ti (caramelo María), no me lo tomes en cuenta ¡te quiero guapísima!
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