Esperamos a que Pepe, nuestro monitor de solfeo, tocara con su banda y despues de unas cuantas canciones, los que nos habíamos quedado a verlo nos fuimos a nuestras casas cerca de las 2 de la mañana.
Esperamos a que Pepe, nuestro monitor de solfeo, tocara con su banda y despues de unas cuantas canciones, los que nos habíamos quedado a verlo nos fuimos a nuestras casas cerca de las 2 de la mañana.
Tomaremos una travesía que atraviesa varios kilómetros siguiendo el curso ascendente del río Dílar y permite apreciar dos tipos distintos de paisajes de ribera. La primera mitad del itinerario, hasta la central hidroeléctrica de Dílar, comprende una zona recreativa, con el consiguiente impacto humano sobre el paisaje. Al continuar la marcha se puede contemplar ya un paisaje natural de ribera, con la verde frondosidad de una abundante vegetación que crece al amparo de la humedad del lecho de su río, que ha de cruzarse en varias ocasiones.
Nos gustaron las jornadas y lo pasamos bien en la convivencia de la comida en el restaurante Abenhumeya, cerca del Hospital Torrecardenas en cuyo salón de actos tuvieron lugar las X Jornadas Almerienses de Salud Mental, Salud Mental y Sociedad en Crisis.
La historia de “El árbol” nos lleva a Australia, a un pequeño pueblo donde Dawn y Peter viven felices con sus cuatro hijos. Pero la muerte de Peter deja a la familia totalmente devastada. Y cada uno de ellos, para continuar viviendo, reacciona a su manera. La pequeña Simone, de ocho años, rechaza el duelo, prefiere trepar a la inmensa higuera que ocupa el jardín. Allí pasa horas y horas con su padre… Para ella, su papá se ha ido a vivir al árbol. La vida vuelve a la normalidad poco a poco y Dawn recupera fuerzas, un trabajo, ¿quizás un nuevo amor?
Una vez llego el hambre, comimos haciendo un picnic en la playa, en un buen ambiente, compartiendo comida.