Asamblea 30 de enero y dinámica sobre estilos educativos

Si el wisky es bueno para la circulación y la coca cola es la chispa de la vida; a mi lo que me sienta mal es el hielo... Con esta broma bien acogida por todos empezamos la asamblea el pasado jueves 30 de enero. Se trató de poner en valor las próximas actividades socioculturales que se realizarán, animando a los compañeros y compañeras a participar de las mismas. Por otro lado se explicó todo lo relacionado con el huerto ecológico del que próximamente dispondremos y, además, se explicaron todas salidas y excursiones que están previstas para desarrollar a lo largo de este trimestre. También se comentó que  el proyecto Grundtvig (en el que este año participamos cuatro asociaciones de cuatro países) había sido finalmente aprobado y nos dispusimos a atender la actividad que nos había preparado María Dolores Salazar. sobre estilos educativos.

La actividad consistía en una dinámica en la que había que construir una casa. Para ello los compañeros y compañeras nos dividimos en tres grupo según un número que se nos fue asignado, quedando formados al final por unas cuatro o cinco personas. Cada grupo estaba coordinado por una persona y su labor era la supervisión de la tarea que realizábamos. 

Una vez divididos, cada grupo nos pusimos manos a la obra. Todos disponíamos de los mismos materiales aunque, como se encargó de destacar José Domingo, algún grupo había sido más pillo que los otros y había utilizado recursos, como el fiso, que no se nos fueron dados al principio.

Tras un tiempo y una vez finalizada las casas, las pusimos en común para ver los resultados y he ahí donde nos llevamos la gran sorpresa. La organizadora de la actividad, María, había pedido a cada coordinador que ejerciese un papel respecto a su grupo atendiendo a uno de los tres estilos educativos existentes: el "dejar hacer" (en el que se deja que cada uno haga lo que quiera sin poner ningún límite), el democrático (en el que todos participan por igual y todos aportan ideas) y el autoritario (donde el coordinador decía todo lo que había que hacer sin dejar ningún margen a la opinión propia). Los resultados fueron concluyentes.

Estilo de casa autoritario

Estilo de casa "dejar hacer"

Estilo de casa democrático

Mientras que en el estilo autoritario la casa que había salido dejaba mucho que desear, las personas que habían trabajado bajo el estilo educativo de "dejar hacer" habían construido una casa, no tan original, pero sí muy colorida y alegre, mucho mejor que la realzada bajo el estilo autoritario. En cuanto al estilo democrático, había sido el gran triunfador: la casa era original, colorida y bien hecha. Fue un ejemplo gráfico a través del cual se nos trató de mostrar qué funcionamiento tienen los diferentes estilos y cuáles son las repercusiones que pueden tener sobre el niño y sobre su configuración cuando alcancen la etapa adulta.

Para acabar la dinámica, María Dolores nos puso la canción de "El niño del Amor" de Mónica Molina, la cual habla sobre la temática de la infancia y de las diferencias que existen cuando un niño es educado de una forma u otra y con amor o sin él.

Finalmente, María, la chica en prácticas de trabajo social que nos había acompañado durante cuatro meses se marchaba y para despedirse nos nos trajo una tarta de la que pudimos disfrutar a modo de merienda.