Con un sol
extraordinario en Granada, veintiuna personas vinculadas a Sapame,
ilusionadas por pisar la nieve, partimos hacia las cumbres nevadas de
Sierra Nevada valga la redundancia. Al llegar a Prado Llano nos
saludó el sol y la nieve, pero no tardó mucho en hacer acto de
presencia las nubes y el viento, que conllevaban algo de fresco, pero
íbamos preparados/as y lo soportamos bien con la incomodidad del
viento.
Fuimos directamente al
Mirlo blanco, lugar de atracciones de nieve, en donde la mayoría se
subió al trineo ruso, en cuya atracción lo pasaron muy bien las
personas que disfrutaron de la atracción. Los mas jóvenes pasaron
también a divertirse con los patines. Mientras las demás personas
les esperábamos sentadas en una terraza, donde el viento se llevaba
el azúcar y los sobres de descafeinado.
Decidimos seguidamente
subir a la Hoya de la Mora, donde nos costó aparcar, a pesar de que
no estaba lo lleno que suele estar el lugar en invierno. Comimos
resguardados/as en el lateral del Albergue Universitario, combatiendo
el frío y el viento. La juventud aprovechó la hora de la digestión
para tirarse por la nieve en trineo. Y las personas mas mayorcillas
nos tomamos algo calentito en el bar del Albergue Universitario. Mari
Jose y José lo pasaron bien revolcándose en la nieve, aunque
llegaron con los pies helados. Y pronto se cambiaron y se pusieron
calentitos.
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El mal tiempo hizo que
sobre las cinco de la tarde nos bajáramos para Granada, tomándonos
algo acompañado de galletas que llevábamos, y comentáramos lo bien
que lo habíamos pasado en la Sierra.
Esperemos que podamos
repetir la experiencia, que fue muy buena.
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